Levanté la mirada,
y tu imagen llamó,
dulcemente,
mi atención.
Mis ojos,
disfrutaban,
observando.
Ese bello colorido,
me mostraste,
impregnado,
de incontables,
granitos de polen,
abrazando toda la esencia,
de tu ser.
Ese contraste,
vivo,
frondoso,
y destacado.
Ese aroma,
a dulce suavidad,
a frescas resinas,
a frías texturas.
Eres,
brevemente,
una flor.
La flor de pino.
De pino canario.
Para siempre.
Gonzalo Bautista, Marzo de 2010.
5 comentarios:
Buenos dias duende, hoy me has alegrado el dia con tu hermosa poesia, que siempre desprende amor.
Un abrazo cálido
Conseguiste hacerme llegar ese aroma de la flor del pino.
Un beso, amigo
Hasta Madrid ha llegado el aroma del pino canario. Delicioso.
Un abrazo.
Un homenaje maravilloso
a la flor de tu tierra,
hay que rendir tributo
al lugar donde uno nace.
Pluvisca:
Me resulta gratificante el hecho de haberte alegrado el día.
Te devuelvo ese abrazo, aumentado.
Emibel:
Ese aroma es especial, y muy difícil de explicar con palabras.
Otro beso para tí.
Carmen:
Si ha llegado hasta Madrid, habrá recorrido media España, jajaja,...
Un abrazo apretao.
MTeresa:
Ya sabes, me siento integrado en la naturaleza de mi tierra.
Un saludo muy afectuoso.
Gracias a todas por vuestra visita y comentarios.
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