En un acogedor restaurante de un pueblecito llamado Tenteniguada, unos amigos
tuvimos la iniciativa de decorar las paredes con una exposición de arte.
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Lienzos con óleos, láminas con dibujos, y ampliaciones de fotografías, fueron los
elegidos para tal evento.
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Liliana, compañera de trabajo, y amiga,
Dimas, amigo y gerente del restaurante,
Y Gonzalo (yo), impulsor de la idea.
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2 comentarios:
UNA IDEA ESTUPENDA, NADA MAS ACOJEDOR QUE ENTRAR UN RESTAURANTE Y ENCONTRARTE CON TANTA MARAVILLA JUNTA.
BESOS
Estas muy guapo duende, y la idea me parece muy acertada.
Besos
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