Una imagen de dos barcas,reposando en una solitaria playa,
de piedras erosionadas,
al atardecer,
con un mar tranquilo,
que acaricia suavemente la orilla,
con el lento vaivén de las olas.
.
No es otra cosa,
que un instante de serenidad,
que el destino ha puesto en mi camino,
porque así debía vivirlo,
saborearlo, y disfrutarlo,
tras unos días de agobio.
.
Ha sido un regalo perfecto.
.
Y pensé en dejarla aquí,
inmortalizada,
porque sólo mirarla,
ya me transmite, serenidad.
Foto y texto: Gonzalo Bautista.
Con COPYRIGHT del propio autor.
DERECHOS RESERVADOS.
7 comentarios:
Una imágen muy bonita,con ella nos regalas también esa serenidad.
Leí que un día con éxito es un día en el que se ha sabido distinguir lo que era importante de lo que no lo era.
Sin duda, has tenido un día exitoso.
Un beso.
Hola Duende, a mi esta foto no me aporta serenidad, sino todo lo contrario ganas de correr, de lanzarme contra las olas, de alimentarme del aire y de la libertad. Pero me encanta tu visión y la foto, espero que estes bien, un abrazo.
Holaaaaaa, amiga Eternia, qué alegría leerte por aquí. Con tus palabras, vemos que todo se puede interpretar de diferente forma. Un abrazo, muy fuerte.
Sí Carmen, fue un día gratificante, y especialmente sereno. Otro abrazo para tí.
Hola Gonzalo!
Aquí me tienes, comentando...
Además de serenidad, a mi me inspira silencio, aquel en el que uno escuha sus propios pensamientos...
Las barcas estan en forma de concha... simbolizan el interior.
Un abrazo
Cierto, Gabado, serenidad, silencio, uno se refugia en su interior para escuchar lo que suena dentro de la mente.
Gracias por tu comentario.
Un abrazo de bienvenida.
Aguas cristalinas, como el corazón de duende...calma y serenidad que sabes impregnar a tus imágenes.
Un besazo
Así es mi propósito, Pluvis. Gracias por tus palabras.
Un abrazo muy sereno, para tí.
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